El Dr Sergio Rulicki abordará las claves para la gestión de la comunicación interpersonal
El especialista en comunicación brindará una charla abierta a todo público y expondrá su modelo para la gestión de la comunicación interpersonal. Una interesante forma de bucear en lo profundo del ser humano y establecer una forma legítima del uso de las jerarquías.
El Dr Sergio Rulicki abordará las claves para la gestión de la comunicación interpersonal
“Es necesario generar mayores espacios de paridad y trabajo en equipo”
¿Cómo analizar y profundizar las interacciones humanas? ¿Qué elementos se ponen en juego cuando hablamos y también cuando callamos? El Dr. en Comunicación Social Sergio Rulicki abordará el próximo miércoles a las 18 horas una charla denominada “La fórmula de los Tres Tercios (F 3/3). Un modelo para la gestión de la comunicación interpersonal”. La misma incluye la Comunicación No-Verbal + Lingüística Forense para la Evaluación de la Credibilidad y será a partir de las 18 en el Auditorio de OSDE, Santamarina 451, dirigida al público en general (datos de inscripción aquí).
En el encuentro, el pionero en Argentina en comunicación no verbal se referirá a la fórmula de los tres tercios, un modelo cuya fuente de inspiración “proviene de la psicología transaccional y la antropología evolutiva. No tiene que ver sólo con lo humano sino con lo pre humano, y el término evolutivo tiene que ver con el comportamiento primate”, explicó.
Sergio Rulicki es Lic. en Antropología, Dr. en Comunicación Social, Director de la Diplomatura en Comunicación NO Verbal de la Universidad Austral, cuenta con tres libros publicados. Fue profesor universitario en la Policía Federal, formó parte de la Escuela de Inteligencia de Prefectura, trabajó para Interpol y Ceos de grandes corporaciones.
En diálogo con Enfoque de Negocios, quien organiza el evento junto a Flama Tandil adelantó que “no hay nada más práctico que una buena teoría y una teoría es un modelo de la realidad. Si a través de los resultados se confirma su eficacia, entonces hay una correlación entre modelo y realidad que es operativa. Ese modelo esa la fórmula de los 3 tercios, no sirve solo para interpretar el lenguaje corporal y de los gestos sino también el verbal, porque el fundamento de la fórmula de los 3/3 es el fenómeno fundamental reconocido por la psicología transaccional como la etología (estudio del comportamiento animal) y la antropología evolutiva, donde el fenómeno central es la comparación de status”.
¿De qué se trata esto?
Esto es entender que lo que estructura la sociedad y participa en nuestra comunicación cotidiana, son los mecanismos para el sostenimiento de la estructura jerárquica de la sociedad.
Dicho de otra manera, no importa cual sea el contenido de tu mensaje: siempre va a existir un meta mensaje acerca de la posición de poder desde el cual se emite el mensaje y hacia quién: hacia alguien que está por encima, por debajo o a la par.
El problema fundamental de la comunicación humana es la falta de habilidad en el manejo de la comparación de status.
O tenemos déficits en algunas de las tres posiciones, o tenemos déficits de autoafirmación, asertividad, dominancia y capacidad de disciplinamiento de otros. Si tenemos ese problema, vamos a permitir que otras personas se coloquen por encima nuestro de manera ilegítima. Y eso es lo que peor nos hace sentir. No es problema si el otro que está por encima tiene el conocimiento o la experiencia. El problema es cuando la gente se encarama en posiciones de poder que no les corresponde. Cuando un jefe no gestiona los recursos que necesita, cuando alguien en una posición superior no ofrece nada y entonces es un tirano.
-Eso aplica a todo contexto y a distintos grupos humanos y relaciones.
Claro, aplica para todo contexto de interacción comunicacional específica. Está presente en forma universal y constante en las familias, en la pareja, en las amistades, en el trabajo, autoridades que gobiernan. Porque eso es parte integral nuclear del comportamiento primate (y nosotros somos un primate más desde el punto de vista biológico evolutivo), y estamos organizados sobre la base de una estructura jerárquica clara. En la sociedad chimpancé muchas veces los líderes son tiránicos. El problema es que en el caso de la especie humana, esa tiranía no se ve compensada por nada, en el caso de los machos alfa por ejemplo es el primero que va a salir a defender al grupo si aparece un leopardo. Y en nosotros, muchos de los que ocupan las posiciones superiores son los únicos que se benefician de esa posición. Por eso es fundamental para promover la evolución social positiva, que aprendamos a manejar la comparación del estatus para poder establecer una forma de relacionamiento que sea legítima, en términos de quién debe ocupar la posición superior, quien debe ponerse al servicio y cómo es trabajar en equipo.
En muchas organizaciones el trabajo en equipo es pobre, debido a que a veces las jerarquías no saben cómo relacionarse desde el lugar de la paridad. Por lo tanto si no hay paridad habrá quien tenga miedo de decir lo que piensa, entonces te estás perdiendo un valor importante para entender la realidad que tenés que resolver.
-¿Cuesta lograr esta paridad y este manejo del status?
Si, por motivos que incluso son ajenos a la voluntad. En la paridad es necesario reunir todos los puntos de vista posibles para entender un determinado tema. Hay que generar un diálogo respetuoso e incorporar los puntos de vista al mapa general.
La dificultad es que la posición de paridad es coyuntural, las posiciones estructurales son inferior y superior. Es estructural porque es permanente, en todos.
La equidad sigue siendo un problema central de la sociedad humana, sin maternos en la equidad material, hay una equidad necesaria en la forma en que nos tratamos socialmente. Es necesario generar mayores espacios de paridad, mayores circunstancias coyunturales en las cuales nos tratemos como iguales, y que busquemos jerarquías legítimas.
-En una sociedad fragmentada e individualista ¿es esto posible?
Es posible en la medida en que lo construyamos entre todos, a través de la forma que nos comunicamos con los demás en términos interpersonales. Lo cual implica cuestiones como que uno tiene que conocerse a sí mismo y darse cuenta dónde tiene los déficits y dónde está exagerando. Uno puede tener respecto de la autoridad y el poder una actitud demasiado sumisa, entonces no vas a crecer en la sociedad. Hay gente que tiene un déficit y la tarea entonces será empoderar y en los que tienen un exceso, la tarea es ponerlos en su lugar, sin temor.
La primera y principal herramienta es el diagnóstico. El diagnóstico significa: los mensajes que emito con mi cuerpo, a qué categoría pertenecen, en qué lugar me pongo en el estatus (inferior, superior o par).
-Imagino que habrá casos concretos donde esto se pone en práctica: una relación laboral jefe/empleado, docente/estudiante. Espacios donde se pone en juego el poder, la autoridad.
Cada lugar y organización será diferente. Siempre hay conflictos de poder, porque es parte intrínseca de la sociedad humana. Pero se pueden minimizar las posibilidades de conflictos a través de distintas estrategias, que son finalmente individuales, porque es uno quien debe poner límites.
-Entonces es quizás un aprendizaje de vida.
Claro! Por eso hablo de lo profundo, no hay otra cosa en esta vida que conocerse a uno mismo y aprender a vivir en la sociedad humana que es complejo, difícil y salir bien parado de las interacciones cotidianas. Las tres posiciones deben ser ocupadas por todos. Aunque en la estructura social haya rangos, en la vida cotidiana -donde interactuamos personas de todos los rangos- es necesario que haya oportunidad para que alguien que está en una situación inferior se sienta parte de un proyecto mayor y pueda tener un contexto de paridad en el cual decir lo que piensa y proponer sus ideas. Y que quien está en una situación superior, tome conciencia de que es ineficiente ocupar ese espacio siempre, hay que darle lugar a otras miradas, porque el otro puede tener siempre algo que enseñarte.
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